Básicamente igual, excepto que el tercer asiento que era solo para niños -o para adultos que se comporten como niños o como acróbatas- ya fue eliminado. Y le modernizaron las cosas electrónicas, como el frenaje automático. Ah, y la pantalla del tablero.
Ah, y asientos con calefacción. Ah, y nuevos portaplacas.
Ah, también le remodelaron la parrilla y los faros.
Ya saben, la abundancia de cambios atrevidos a los que ya nos tiene acostumbrados la fábrica alemana.
Pero la novedad que podría entusiasmarnos más -la llegada de una nueva versión R a nuestro continente- no aparece en la noticia.
O sea, entonces ¿por qué es noticia? Porque si no hablamos de VW de vez en cuando, los vaguetos que nos leen para hacer berrinches, se ponen todavía más imposibles.