La nueva edición de la gran camioneta de Toyota, que representa su cuarta generación, se apoya en la nueva plataforma de Toyota New Global Architecture (TNGA-K) que promete (y concede) mayor capacidad, comodidad y eficiencia.
La Toyota Highlander 2020, que estará llegando a las concesionarias este mismo mes -y quizá más adelante en versión híbrida- no pierde el señorío que siempre la ha caracterizado.
El frente es indiscutiblemente novedoso y lo mismo la vista lateral -sin perder la nueva identidad de la marca y con un obvio incremento en sus dimensiones. Específicamente, la carrocería de la cuarta generación es 6 cm más larga, lo que permite aprovechar mucho mejor el espacio interior.
Con este nuevo bastidor, se vuelve más rígida y por lo tanto estable al apoyarse mejor y entonces se le pueden poner resortes más suaves y confortables. También ofrece aceros especiales en las áreas críticas y un nuevo diseño de la suspensión.
Dispone de un V6 de 3.5 litros con inyección directa que eroga 295 hp y 263 libras-pie de torque. Este motor se acopla a una transmisión de ocho velocidades con las que puede remolcar un máximo de 2 1/4 toneladas.
Naturalmente, la nueva Highlander también vendrá en una versión híbrida, con un nuevo sistema compuesto por un motor de cuatro cilindros de 2.5 litros junto a dos motores eléctricos. Al combinarse el resultado es 240 hp y un consumo promedio de 14.4 km/l, interesantes para un vehiculo de este tamaño y capacidad.